Sueño y TDAH
Existe una relación muy estrecha entre los trastornos del sueño y el trastorno por déficit de atención e hiperactividad. El trastorno del sueño está asociado al TDAH y lo sufren entre un 30 y un 60% de las personas con TDAH.
Por otro lado, se pueden ver incrementados los síntomas del trastorno por déficit de atención. Disminuyendo el rendimiento académico, dificultando el desarrollo social y emocional, impulsividad y aumentando los problemas de atención. Es importante mantener un hábito de sueño para que los rasgos del TDAH no se vean más afectados. Podrían aumentar las dificultades de concentración y atención, impulsividad y también la desregulación emocional.
Es conveniente realizar hacer una evaluación del sueño con distintos profesionales, ya que, esto permitirá un tratamiento más adecuado.
¿Cómo puedo saber si mi hijo/a padece algún trastorno del sueño?
A continuación encontrarás algunas señales de alerta que te permitirán entender si tu hijo/a puede padecer algún trastorno del sueño.
- Tienen dificultades para conciliar y mantener el sueño
- Se despiertan de noche o muy temprano por la mañana
- Hablan cuando están dormidos
- Tienen pesadillas
- Miedo a la oscuridad
- Movimientos involuntarios
- Sonambulismo
- Enuresis
- Apnea del sueño
Intervención psicopedagógica
- Crear un hábito de sueño: Ir a dormir siempre a la misma hora.
- Realizar una actividad relajante: Antes de ir a dormir es importante la relajación para que nuestro cuerpo vaya entrando en un estado más tranquilo y prepararlo para dormir.
- Hacer ejercicio: La actividad física tiene un impacto muy positivo en el TDAH, la concentración y la atención aumentan y también aumenta la calidad del sueño.
- Evitar el uso de las pantallas: Uno de los enemigos principales en el momento de conciliar el sueño son las pantallas. La luz que emiten las pantallas afecta a la secreción de melatonina necesaria para poder dormir. Las pantallas son estimulantes (por tanto, no ayudan a que nos relajemos). Se pasa demasiado tiempo frente a ellas, en consecuencia, sé desplaza la hora de ir a dormir.